Sergomil Eco y Peels, los bioestimulantes de Servalesa
Según un estudio realizado por Servalesa, el uso combinado de los bioestimulantes Sergomil Eco y Peels mejora la calidad de la piel de los cítricos, potenciando así su firmeza y evitando su debilitamiento y mitigando el envejecimiento. De esta manera, es posible preparar los frutos para la vida después de la cosecha.
Para determinar la calidad final de la cosecha de cítricos, es fundamental un manejo óptimo en las etapas finales del ciclo de cultivo, a partir del cambio de color. Por lo tanto, una estrategia centrada en mejorando la conservación y protección de la piel puede tener un efecto directo sobre el valor final del cultivo y la rentabilidad para el agricultor.
sergomil eco Es un bioestimulante a base de una formulación líquida compuesta por derivados de sacarosa y cobre complejado, cuyo modo de acción se basa en la capacidad de aumentar el nivel de cobre en el interior de la planta (favorecer la síntesis de enzimas clave), optimizar el proceso de fotosíntesis y reducir diversas fisiopatías asociado con la deficiencia de cobre.
Pero una de las propiedades más importantes del modo de acción de Sergomil Eco es su capacidad para activar vías metabólicas asociadas a la síntesis de lignina, fortalecer la pared celular de las estructuras vegetales y mejorar así la firmeza del fruto. En un estudio realizado por la Estación Experimental Zaidín (CSIC) se probó la capacidad de este producto para activar la síntesis de proteínas PR dependientes de la vía del ácido salicílico.
Por su parte, Pela es un bioestimulante a base de una formulación líquida compuesta por ácidos orgánicos insaturados, potasio y ácidos carboxílicos. Su modo de acción se basa en su capacidad para reducir el estrés oxidativo y mitigar las condiciones de estrés abiótico que pueden afectar a la pared celular por exceso de humedad.
“Es obvia la necesidad de poder producir frutas con base en estándares sostenibles y saludables que además tengan una vida útil suficiente para garantizar su comercialización en los distintos mercados de interés. El desafío es hacerlo con base en prácticas agronómicas que resulten en un cero- residuos de la cosecha, y que afecta a los múltiples aspectos que rodean al cultivo (antes de la cosecha), su posterior tratamiento y conservación (después de la cosecha)”, explican desde Servalesa.