¿Por qué es importante analizar la calidad del agua de riego?
Es importante controlar y monitorear la calidad del agua que utilizas para regar tus cultivos para garantizar tu seguridad y la de tu entorno.
Como no podía ser de otra manera, el agua se considera un recurso imprescindible para el desarrollo de la actividad agrícola, ya que sin su presencia, natural o artificial, sería prácticamente imposible imaginar el pasado, presente y futuro de esta actividad.
En este sentido, es necesario aclarar que al hablar de agua para uso agricola Se hace referencia no sólo al uso de este elemento para el desarrollo del riego de cultivos, sino también a su uso necesario para la preparación y solución de tratamientos fitosanitarios o para la limpieza de equipos e instrumentos utilizados por las personas que desarrollan su actividad en la tierra agrícola.
Sin embargo, sea cual sea el uso que se le dé a este preciado y lamentablemente escaso recurso, será fundamental garantizar en todo momento que esté libre de sustancias nocivas o contaminantes que puedan tener un efecto contrario al deseado, como por ejemplo concentración de metales pesados y otros residuos de una actividad industrial cercana, residuos fecales de un asentamiento humano cercano o, de manera similar, la presencia natural de bacterias o parásitos que usan este entorno para moverse y residir en un organismo más grande desarrollado para reproducirse en .
Son este tipo de riesgos los que hacen necesario con cierta frecuencia y sobre todo ante cualquier sospecha derivada de percepciones sensoriales como su color u olor, proceder a análisis de la calidad del agua que pretende utilizar para su actividad agrícola.
De esta forma, a través de un control y análisis, por lo menos anualmente, de la fuente de la que tiene capacidad y permiso para extraer agua para su fin agrícola, se podrá determinar si cumple con los criterios adecuados de nivel biológico y químico, o si por el contrario, es preferible renunciar a su uso y buscar cuanto antes otras alternativas hídricas disponibles.
Aunque a veces no se le da la importancia que realmente merece, este proceso de inspección es fundamental para garantizar tu seguridad, la de tus cultivos y, por supuesto, la de las personas que puedan consumir tus productos agrícolas, tanto interna como externamente. para la venta a través de canales mayoristas o minoristas o para la venta directa a los consumidores.