¿Cómo promover la salud y conservación de las tierras de cultivo?
A la hora de llevar a cabo todos los métodos que favorezcan la mejora de tus cultivos, ten presente la necesidad de cuidar al máximo tus tierras de cultivo.
Si bien es normal que a la hora de desarrollar tu actividad agrícola centres tu atención en las acciones y medidas necesarias para el óptimo crecimiento y desarrollo de tus cultivos, es igualmente importante que tengas en cuenta otro elemento fundamental para lograr una mayor productividad de tus cultivos, como es salud del suelo agrícola.
Además de la calidad de la semilla utilizada y del cuidado diario que le dediques a cada cultivo, no olvides que la superficie sobre la que la siembres será la encargada de aportar la mayor parte de los nutrientes y el agua que necesita.
En consecuencia, si no se llevan a cabo las prácticas recomendadas para garantizar una adecuada conservación de los terrenos agrícolas, éstos presentarán una exposición mucho mayor a la presencia de posibles erosiones provocadas por las lluvias, el viento o cualquier otro fenómeno natural. o incluso debido a su acción involuntaria durante su trabajo diario.
Por ello, hoy queremos aprovechar este espacio para ofreceros un repaso por ellas. buena práctica en el que puedes empezar promover una mejor conservación de las tierras agrícolasy que resumiremos a continuación:
- En primer lugar, comience con analice cuidadosamente la textura del suelo agrícola en su granjaidentificar la práctica más adecuada para cada tipo de superficie.
- También será práctico examinar la profundidad del suelo en su parcela, es decir, el ancho del suelo existente desde la superficie hasta el lecho rocoso debajo de él. De esta forma, podrás tener información relevante sobre los cultivos más recomendables, y elegir especies con raíces más o menos superficiales.
- eso tambien sera importante evalúe la capacidad de infiltración y drenaje de sus tierras de cultivoespecialmente si se encuentra en lugares con fuerte pendiente o con mayor exposición a fenómenos atmosféricos adversos.
Con base en esta información, será el momento de considerar qué medidas pueden ser las más recomendables para evitar o al menos frenar su erosión, como la instalación de barreras naturales o artificiales, la complementariedad con otras especies favoreciendo el anclaje del suelo o la incorporación de residuos o materia orgánica, para aumentar la fertilidad y oxigenación del suelo evitando su excesiva compactación .