Comparación, humus líquido y humus sólido.
¿Por qué el humus sólido es un buen producto?
En los ecosistemas existen una serie de microorganismos llamados descomponedores, que se encargan de convertir la materia orgánica residual en compuestos que pueden ser aprovechados por las plantas. Esto es lo que comúnmente se llama el ciclo de la materia. En los gusanos, y más concretamente en sus intestinos, viven miles de millones de este tipo de microorganismos de descomposición. El alimento que consumen las lombrices debe ser procesado por ellas, dando como resultado un fertilizante natural de la más alta calidad: humus de lombriz. En el humus producido la proporción de nutrientes no es muy alta, ya que la transformación de la materia orgánica que se produce en el interior de las lombrices no es química, sino microbiológica. Por tanto, el verdadero valor del humus de lombriz reside en la vida que contiene, no en su composición química. Este es un concepto clave ya que en agricultura tendemos a valorar los productos en función de su contenido en macroelementos como nitrógeno, fósforo o potasio. [bctt tweet=”El auténtico valor del humus de lombriz radica en la vida que contiene, no en su composición química.”] Como propiedades destacables del humus tenemos su pH neutro, la cantidad de ácidos húmicos y fúlvicos que posee y su enorme capacidad de intercambio catiónico, propiedad que explica su enorme capacidad para retener nutrientes y agua. Cuando se aplica humus al cultivo, los microorganismos del producto colonizan el suelo y comienzan a descomponer la materia orgánica y los minerales existentes para que la planta los absorba. Es decir, “logra dar alimento” al cultivo. Además, mejoran la estructura del suelo para poder retener más humedad y ahorrar agua, y protegen las raíces del ataque de patógenos. Como resultado final, nuestro cultivo producirá frutos con más azúcar, los percibiremos con más sabor y lo más importante, mejorará la salud general de nuestra finca. A nivel físico en el suelo, el humus mejora la aireación y la retención de agua. Gracias a estas dos mejoras consiguen mejorar la germinación de las semillas. Además, facilita la formación de complejos arcilla-humus y, en consecuencia, reduce la erosión del suelo y facilita mucho el manejo del suelo.
¿Tiene el humus líquido las mismas propiedades que el humus sólido??
La respuesta es un sí rotundo. De hecho, el humus líquido es un producto mucho más completo. Él humus liquido Contiene todos los microorganismos que se encuentran en el producto sólido, y por supuesto aporta todos los beneficios microbióticos que ya hemos mencionado. Además, aporta nutrientes como aminoácidos naturales y extractos de algas que lo convierten en el fertilizante perfecto para cualquier planta. Al ser líquido la aplicación es muy fácil; basta con aplicarlo con riego normal o mediante el sistema de riego instalado. Gracias al sistema venturi o similar es totalmente posible. La dosificación es muy sencilla: basta con mezclarlo con la cantidad de agua necesaria para el riego. Por estos motivos, se produce una reducción de los costes logísticos, permitiendo al agricultor con una inversión similar aplicar mucho más humus líquido que sólido durante la temporada de crecimiento, multiplicando los beneficios. Por otro lado, su carácter líquido hace que llegue mucho más rápido a las raíces. Los microorganismos que les hemos suministrado se asientan antes, se reproducen a mayor ritmo y las plantas absorben los nutrientes rápidamente; El resultado visible es mucho más evidente y más rápido que con el humus sólido. En cultivos intensivos bajo abrigo, 120L/ha al año de humus líquido son suficientes para mejorar la productividad y alargar la duración de la plantación. En frutales la dosis varía entre 60 y 90 litros/ha al año, dependiendo mucho del marco de la plantación y de las propiedades del suelo. Para pequeños huertos y jardines la dosis es de 1L/m2 por año, repartidas en varias aplicaciones a lo largo de la campaña de producción. Como complemento se puede apoyar con abono foliar, como es el caso verdefol para lograr un mayor efecto.
¿Qué tiene de especial el humus líquido?
El Humus Líquido es un producto fresco y elaborado según necesidad, por lo que debe aplicarse dentro de los 7 días siguientes a la entrega. Esto se debe a que los microorganismos que contiene continúan multiplicándose dentro del recipiente, pero crecen en proporciones diferentes a las que lo harían en el suelo. Debido a esto, ciertas comunidades desaparecen y otras multiplican su número exponencialmente, y como resultado se obtiene una microbiología muy diferente a la que pretendemos establecer en el suelo, que es la que mayores beneficios nos dará. Por todo ello recomendamos que los productos se almacenen en lugares frescos, alejados de lugares calurosos o del sol. En resumen, tanto el humus sólido como el líquido tienen propiedades similares cuando se agregan al suelo. Sin embargo, el humus líquido, al ser más fácil de aplicar, tiene un menor coste del producto y tiene un efecto más inmediato, es la mejor opción para el agricultor y jardinero, ya que facilita una actuación más rápida y sencilla. [bctt tweet=”El humus líquido, al tener una facilidad mayor de aplicación, un menor coste del producto y un efecto más inmediato, constituye la mejor opción para el agricultor y jardinero.”] El humus líquido es mucho más barato que el humus sólido, si hablamos en euros por
