Uso de herbicidas y control de malas hierbas en olivares
Hay tres factores que afectan significativamente al rendimiento de los olivares: las enfermedades, las precipitaciones y las malas hierbas.
No se debe subestimar la presencia de estos últimos cerca del árbol, especialmente bajo la copa, ya que pueden causar serios problemas con un impacto muy negativo en el coste de explotación y recolección.
Es precisamente el coste de la cosecha, y también el coste de la poda, el que supone el mayor importe para el olivarero, tal y como apunta el experto en olivicultura de Syngenta, Juan Trigos. Ambos suponen el 50% de la inversión total en una explotación de este tipo.
Por lo tanto, es importante verificar malas hierbas. Los herbicidas destinados a este cultivo tienen una doble función, destaca Trigos; Por un lado, se encargan de eliminar las malas hierbas que dificultan el correcto desarrollo del cultivo y por tanto la productividad, y por otro, preparan el terreno para la recogida de la aceituna y eliminan aquellas que puedan entorpecer el trabajo de las máquinas u operarios.
El uso de herbicidas se convierte así en una necesidad a la hora de dotar de sostenibilidad en todas sus variantes -económica, social y medioambiental- a un cultivo del olivo.
Características de las malas hierbas más importantes del olivar y estrategias de control
Red de Alerta e Información Fitosanitaria (RAIF) de la Junta de Andalucía.en su boletín ‘Las malas hierbas más importantes del olivar’, afirma que son innumerables las especies de malas hierbas presentes en el suelo de los olivares españoles. Generalmente, germinan en primavera y otoño y completan su ciclo vegetativo el resto del año. Su alta tasa de reproducción y germinación las convierte en una especie muy peligrosa por su carácter invasivo y altamente competitivo. La germinación escalonada de las semillas de algunas de ellas dificulta la estrategia de control.
Algunas de las más comunes son el diente de león, la cebadilla, el fresno, la vara o la correhuela, pero hay otras cuyo control se complica en los olivares porque han desarrollado resistencia a los herbicidas, como la piña, el vallico, el bromo. . , la sombrilla o paraguas, la hierba o malva.
De todos ellos, Vallico (Una piruleta dura) merece una mención especial ya que su presencia se ha convertido en un quebradero de cabeza para los agricultores desde hace años por la dificultad de controlarla.
Vallico es una gramínea anual y perenne muy extendida en los campos de maíz de nuestro país y en los últimos años también en los olivares, donde presenta un problema recurrente de resistencia a los herbicidas.
Explican desde Syngenta que el uso continuado del mismo herbicida o herbicidas con un modo de acción similar no es la única razón para el desarrollo de resistencias.
La aplicación en dosis bajas también afecta ya que debilitan la planta sin llegar a matarla, lo que también se suma al hecho de que algunos agricultores confunden el vallico con bromo y usan el herbicida equivocado.
Otros problemas de esta naturaleza son suyos. alta diversidad genética y alta densidad de ataque. El vallico inicia su crecimiento en otoño, pudiendo desarrollarse a bajas temperaturas que coinciden con la época de recolección de la aceituna en la península.
Las tres principales estrategias para el control de las malas hierbas en los olivares son el deshierbe manual, el deshierbe mecánico y el uso de herbicidas.
Si nos centramos en este último caso, el control químico, previo a la emergencia, debe realizarse cuando se hayan realizado acciones de control cultural, como mantener un suelo limpio de residuos vegetales y con un nivel de humedad adecuado.d) Después de la emergencia, las medidas de control cultural deben basarse en operaciones de deshierbe y siega mecánica; en el caso de malezas perennes, se debe cortar la parte aérea de aquellas con capacidad de regeneración.
Syngenta pone a disposición del agricultor terafitasherbicida sistémico para aplicaciones de preemergencia y postemergencia temprana con actividad residual y de contacto para el control de malezas de hoja ancha y hoja angosta en olivares, cítricos y viñedos.
Es eficaz contra trituradoras, dicotiledóneas y gramíneas.
terafitas ha tomado el testigo de principios activos que habían sido un referente en la lucha contra las malas hierbas en los olivares hasta que se restringió o prohibió su uso. Además, hay nuevos requisitos ambientales. terafitas en la solución ideal.
En este sentido, Juan Trigos destaca la importancia de ser un producto seguro para el medio ambientecomo lo demuestran numerosas pruebas donde se certifica que terafitas No hay riesgo de contaminación del agua, ya sea por escorrentía o por infiltración en los depósitos de agua subterránea. Asimismo, existen otros trabajos que demuestran la ausencia de trazas del producto en el aceite.
En cuanto al método de uso, terafitas se basa en la pulverización normal. Se debe realizar un único tratamiento por cultivo y año y la dosis del producto debe ajustarse de acuerdo con la persistencia requerida y la especie de malas hierbas a controlar. Las partes verdes del cultivo no deben mojarse.
Es necesario asegurarse de que el equipo de aplicación esté correctamente calibrado y que siempre se logre una aplicación uniforme.
La dosis recomendada es de 0,06-0,2 kg/ha. Desde Syngenta destacan que para realizar una buena práctica agrícola se recomienda tratar únicamente los bordes o líneas de los árboles